Principio de Dominio Propio

" Más vale hombre paciente que valiente, mejor dominarse que conquistar cuidades" Proverbios 16:32           ( Biblia de Jerusalèn)

Controlar nuestro espíritu es manejar nuestro comportamiento ó emociones. El comportamiento es directamente afectado por nuestras emociones. Somos espíritu , alma y cuerpo. El cuerpo reacciona a las emociones ó a las alteraciones del alma. Es por eso que el proverbio dice: " mejor dominarse"... queriendo decir que nosotros podemos controlarnos. Controlar nuestro espiritu no siempre es fácil, por que el es "lo que somos realmente". Todo lo que oimos, vemos, saboreamos o tocamos entra a nuestra mente y ella analiza las situaciones y aconseja una respuesta. Luego nosotros (nuestro espíritu) decidimos cómo reaccionar ó responder, afectando nuestras emociones (alma) y al final nuestro comportamiento (cuerpo). "Mejor es dominarse"... equivale a: " aquel que decide disciplinar ó manejar sus respuestas".

Todos tenemos emociones y podemos enfadarnos por diferentes cosas. Pero es extremandamente importante que aprendamos como calmarnos y manejar aquellos sentimientos; o podrán destruirnos.

Dios nos dio manos para trabajar, pies para caminar, ojos para ver y cerebro para manejar todos los demás miembros del cuerpo. Nuestro comportamiento debe ser manejado y timoneado, es decir gobernado por nuestro espíritu, lo que significa que seremos responsables por lo que hagamos con èl. El valor de una persona se basa en su habilidad para controlar o manejar su temperamento, sus hábitos y todas sus emociones. Debemos entender que nos comunicamos a travès de nuestro comportamiento. Las personas nos juzgan por nuestro comportamiento, pues es lo que ellos ven.

Las emociones no controladas pueden arruinar nuestra reputación; por ejemplo, al tirar una puerta, o hacer una " mala mirada" sin nisiquiera decir una palabra. Las palabras son importantes, pero la emoción que ponemos en ellas es aún mas importante. Luego, el lenguaje corporal, no verbal, que usamos, dice mucho sobre nuestro carácter, como las palabras. Algunas veces nuestros modales o acciones hablan tan fuerte que se hace difícil oir lo que estamos diciendo. Como alguien dijo: " haz saber a todos lo que piensas y si es necesario usa las palabras".

El punto clave es: o aprendemos a obedecer a nuestro espíritu (lo que es correcto), tomaremos el control de la situación , en lugar de que la situación tome el control nuestro.

Pidamosle a Dios que nos envie siempre a su Santo Espiritu para que habite en nosotros y nos de la fuerza para poder dominar nuestras emociones. 

Escrito por Jhon Schrok- Hombre de negocios.

(compartido por nuestra Hermana Consuelo Uribe)